05/10 Actividad en Solidaridad con el Pueblo Palestino

   El pueblo palestino lleva más de  60 años resistiendo la ocupación, usurpación y colonización de sus tierras por el Estado israelí y pidiendo a la comunidad de naciones que Israel cumpla con las resoluciones de Naciones Unidas y el derecho Internacional.
Se suma a esto que en abril de 2002 Israel comenzó la construcción de un muro con el cual está encerrando y aislando al pueblo palestino de Cisjordania constituyendo una violación del derecho internacional y contribuyendo a la comisión de graves violaciones de derechos humanos, económicos, sociales y culturales.
El muro constituye una imposición de castigos colectivos a la dignidad y libertad del pueblo palestino. Sus consecuencias son la demolición de viviendas, la obstrucción del acceso a la salud y la educación, la separación de las familias, la anexión de tierras ocupadas y la violación del derecho de los palestinos al trabajo y la libertad de movimiento.

Invitamos el sábado 5 de octubre a una actividad de denuncia de la situación y en solidaridad con el pueblo palestino.

EL DOCUMENTAL : Al Otro Lado: La vida en Palestina dividida por el muro israelí

Documental que presenta la difícil situación de los palestinos que tienen que vivir con un muro en medio de sus poblaciones, el que construyó Israel en la vía que une Jerusalem y Jericó.

El muro complica sus traslados y comunicaciones en la vida cotidiana, situación que se agrava con los controles israelíes que no se sabe dónde estarán y cuánto les demorarán.

José Antonio Martín Pallín, Magistrado del Tribunal Supremo de España, integrante de una misión de observadores dice que el muro no es un instrumento de defensa como dice Israel, sino de ocupación.

El documental presenta también la abusiva demolición de casas palestinas, el testimonio de un ex soldado israelí ahora integrante del Comité israelí anti demolición de casas, y la difícil convivencia de palestinos con los colonos israelíes instalados en medio de las aldeas palestinas de Jerusalem.

EL LIBRO: El racismo de la “democracia” israelí.

La tragedia palestino-israelí es altamente significativa de nuestro tiempo. En términos puramente históricos cubre todo el siglo XX, mejor dicho, se inicia a fines dei s, XIX y se mantiene lacerante en pleno siglo XXI. Sin embargo, las atrocidades del nazismo distorsionaron nuestro conocimiento, como que nos empañaron la mirada otorgándoles a los sionistas un salvoconducto de inocencia perpetua y absoluta. Que tan bien han aprovechado como movimiento irredentista para que se haya suspendido todo juicio sobre sus propias acciones, convirtiéndose en los administradores del sufrimiento judío ante la máquina de matar nazi. Una red de intereses y sobre todo poderes, administrados desde los ámbitos institucionalmente más encumbrados del planeta, como la ONU, han sido decisivos para ese curioso recorte secuencial, mediante el cual "el sentido común" nos cuenta que Israel es la respuesta al nazismo. En términos cuantitativos, no puede dudarse de su éxito: un movimiento, el sionismo, dentro de la comunidad judía, que a comienzos del s. XX no debía tener más del 10% de apoyo y que a fines del mismo siglo debía contar con más del 90% de apoyo de la misma comunidad (que ya no es la misma). Pero hay otra historia. Y lo dice, con palabras justas un judío, precisamente, Zygmunt Bauman: "El Holocausto no fue la antítesis de la civilización moderna y de todo lo que ésta representa [...] el Holocausto podría haber descubierto un rostro oculto de la sociedad moderna, un rostro distinto del que ya conocemos y admiramos. Y que los dos coexisten con toda comodidad unidos al mismo cuerpo [...]."